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viernes, 31 de mayo de 2019

La broma, obra de teatro de Felipe Buendía

La broma. Felipe Buendía. Edición de Paz Mediavilla
La broma. Felipe Buendía
Nuevo título de Mirada Malva

La broma. Tragicomedia para tres personajes
Felipe Buendía
Edición de Paz Mediavilla
Formato ebook
ISBN 9788494852381

La broma, obra inédita de Felipe Buendía, rescatada, transcrita y corregida del original por Paz Mediavilla, se caracteriza por hacer una fotografía realista de la sociedad peruana del momento. En un juego teatral que mantiene al espectador expectante, nos presenta a través de sus tres personajes, dos hombres y una mujer, una sociedad machista, racista y elitista que Buendía aborda con crudeza.

Entre el misterio y el género policíaco, la historia nos introduce poco a poco en un mundo inesperado y nos va llevando a una serie de olas emocionales que acabarán con un final insospechado.


Felipe Buendía
Felipe Buendía


Felipe Buendía del Corral (1927-2002, Lima, Perú)

Escritor, poeta, pintor, periodista, cineasta, dramaturgo, bibliotecario, cronista de Lima.
En cuanto a su obra literaria, destaca su labor como escritor de relatos fantásticos. Su cuento El baúl, de 1952, es un destacado ejemplo de su producción. Posteriormente, en 1959, realizará una edición en tres tomos de la Antología de la literatura fantástica, que seleccionará y anotará y que fue publicada por la editorial Tierra Nueva.
Más tarde la reeditará a través de dos títulos: Cuentos de laboratorio, 1976, que tendrá una segunda edición en 1987 y El claustro encantado, en 1984.
Continuador de la tendencia de la época en Perú, en la que los escritores lo eran de todos los géneros literarios posibles, escribió narrativa, poesía, artículos de prensa y el género que nos ocupa en esta ocasión: teatro.
En 1960 recibió el Premio Nacional de Teatro por Las nuevas galas del emperador, que fue retirada del escenario a los 15 días de su estreno por ser considerada una sátira política. En 1963 volverá a vivir una situación similar al retirarle la policía su obra La broma.



Paz Mediavilla, (edición de)

Es doctora cum laude en Filología Hispánica por la Universidad Complutense de Madrid —especialista en teatro— y máster en Radio por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Su trayectoria profesional ha estado ligada a la enseñanza universitaria y al periodismo.
Ha sido Profesora de Lengua y Literatura Españolas en la Universidad Complutense de Madrid, la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo en Santander y la Universidad Estatal de Ohio (Ohio State University).
Desde hace más de 20 años colabora con diferentes medios de comunicación como redactora especializada en teatro y con varias revistas y editoriales como editora y correctora.
En el medio radiofónico, en el que actualmente trabaja, ha dirigido la sección Lunes de Teatro en la radio digital Crossroads Radio y ha formado parte del equipo del Área de cultura de Radio Nacional de España como redactora y locu-tora.
Ha sido jurado del Certamen de Teatro Universitario de la Universidad Complutense de Madrid en su XX y XXII ediciones.

viernes, 2 de febrero de 2018

El teatro peruano contemporáneo (1960-2000). Aproximación

El teatro peruano contemporáneo (1960-2000). Aproximación

Paz Mediavilla
RESUMEN
  
                El teatro peruano contemporáneo (1960-2000). Aproximación, es un trabajo de investigación que nació en un intento de dar respuesta a un supuesto inicial: no podía ser que el teatro peruano contemporáneo terminara al final de la década del cincuenta, con los pocos escritores que se mencionan de manera escueta en las historias de la literatura, como Sebastián Salazar Bondy, Enrique Solari Swayne, Juan Ríos o Julio Ramón Ribeyro. Escritores que, por otra parte, destacan por su labor en otros ámbitos de la literatura y no se definen especialmente por ser dramaturgos. Debía estar gestándose una nueva generación de autores teatrales a partir de los sesenta que no había alcanzado notoriedad en Perú y, por supuesto, tampoco había trascendido fronteras.
                Vargas Llosa, en el prólogo a su Obra reunida, da alguna pista sobre el momento histórico “escribir teatro, en la Lima de aquellos años, era peor que llorar; condenarse, o poco menos, a no ver nunca lo que uno escribía, de pie en el escenario, algo todavía más triste y frustrante que, para un poeta o novelista, morir inédito” [2001: 4]. La enorme desigualdad social que caracterizaba a la sociedad peruana en aquel momento sólo facilitaba el acceso a las salas de teatro a una pequeña élite. Por otro lado, se entendía el espectáculo teatral como lugar de esparcimiento más que como expresión cultural, como deja entrever Sara Joffré en su obra La madre: 
... porque (Se acerca al público como para contar un secreto.) además de decir unas cuantas porquerías ¿saben dónde está la gracia de mi show? (Ríe fuerte.) Pues que, como a los señores y las señoras decentes cuando van a divertirse les gustan las cosas raras... (Piensa y duda.) y como uno ya no tiene mucho que ofrecer, me anuncian como travesti, pero yo no soy travesti... Claro que no, yo se los puedo enseñar ahorita mismo, pero no, hasta ahí no llego, ya les dije que con las vulgaridades... Bueno cuando no me las exigen como condición para comer, claro está... así pues que los travesti ahora cobran más que nosotras, porque claro, un travesti jala[1] más que una vieja... Bueno, ustedes me comprenden... 
                De modo que las salas necesitaban asegurarse no perder dinero en sus producciones y llevaban a escena éxitos del teatro europeo o espectáculos de divertimento que les aseguraban la taquilla. Por otra parte, el privilegio de la publicación y del interés de la crítica era patrimonio de unos pocos, como pone de manifiesto el escritor Felipe Buendía, en una entrevista con ocasión de su Premio Nacional de Teatro, en 1960, “y como quiera que todo funciona en base a intereses más o menos mezquinos, más o menos parciales, nunca se sabe en realidad el valor de nada” [Anónimo, 1960]. Sólo la existencia de algunas pequeñas subvenciones de la Dirección Nacional de Teatro y privadas, por parte de las universidades, propició que se conociera a unos pocos autores nacionales.
                El objetivo de este trabajo era verificar esa primera intuición y ofrecer un panorama del teatro que se hacía en Perú desde la década del sesenta hasta finales del siglo veinte. Es una etapa marcada por la inestabilidad política y económica, factores que serán decisivos socialmente y que se verán reflejados en los planteamientos teatrales de cada momento.